En el mundo agitado de hoy, muchas personas sufren de trastornos relacionados con la voz, sobre todo aquellas que tienen el hábito de fumar o que necesariamente necesitan la voz para ejercer una determinada profesión.
Por esta razón, no está de más visitar al otorrino de manera preventiva para evitar daños futuros en las cuerdas vocales.
No es un secreto que, para los docentes, la voz es un instrumento esencial en el aula y es vital atender debidamente su cuidado.
¿Sabías que el 30% de los docentes tienen algún problema relacionado con su voz?
Por ello presentamos una lista de algunas enfermedades que pueden afectar la voz de los docentes y una lista de cuidados que deben seguir:
Entre las enfermedades que afectan la voz tenemos:
- Laringitis: inflamación de la laringe, que puede hacer que la voz suene ronca o grave.
- Pólipos de las cuerdas vocales: crecimientos benignos en las cuerdas vocales que pueden afectar el tono y la claridad de la voz.
- Nódulos de las cuerdas vocales: engrosamientos en las cuerdas vocales que pueden causar disminución de la calidad vocal.
- Reflujo laringofaríngeo: se genera cuando el ácido estomacal viaja hacia la parte superior del sistema digestivo y causa irritación de la garganta y las cuerdas vocales.
- Esguince vocal: lesión por uso excesivo de las cuerdas vocales que puede causar dolor y dificultad para hablar.
Cuidados que los profesores deben seguir para proteger su voz y cuidar sus cuerdas vocales después de dar clases de manera continua:
- Descansa la voz: Limita la cantidad de tiempo que pasas hablando fuera del aula, y también usa algunos minutos de tus descansos para reposar la voz. Tu cuerpo necesita descansar para reparar los tejidos que son necesarios para que tu voz sea clara y fuerte.
- Bebe agua: Mantén tu cuerpo hidratado bebiendo agua regularmente. La hidratación es vital para el correcto funcionamiento de tus cuerdas vocales y para mantener una buena salud general.
- Evita el abuso vocal: Evita hablar en ambientes ruidosos o gritar, así como carraspear o aclararte la garganta de manera constante. Estos movimientos pueden irritar aún más tus cuerdas vocales.
- Toma descansos: Cuando te sientes fatigado o agotado después de la clase, usa ese tiempo para tomar un descanso y permitir que tus cuerdas vocales se recuperen.
- Realiza ejercicios de vocalización: Prueba diferentes ejercicios de vocalización, desde respiración profunda hasta producir diferentes tonos, para fortalecer y ampliar el rango de tu voz. Además, intenta hablar más suave y relajadamente de manera continua.
- Evita factores irritantes: Evita fumar y también el consumo de alimentos picantes, café y otras bebidas irritantes para las cuerdas vocales.
- Busca atención médica: Si experimentas dolores persistentes, ronquera, dificultad para respirar mientras hablas, discapacidad, la realización de terapia de voz debería ser una opción para ti.
- La terapia del habla o el entrenamiento vocal también puede ser útil para aquellos con problemas vocales crónicos.
Siguiendo estos consejos, podrás notar una mejora significativa en la calidad de tu voz.
Si continúas experimentando problemas vocales, es importante buscar atención médica de un Otorrinolaringólogo o Foniatra, para recibir tratamiento y prevenir problemas mayores.